Existen diferentes tipos de impresoras 3D, pero en la que nos vamos a centrar son las impresoras FSM, que utilizan termoplásticos para funcionar y son las más habituales en los hogares. Este tipo de impresoras utilizan filamentos de plástico PLA y ABS, aunque también se han utilizado filamentos de madera, corcho e incluso café.
Las impresoras SLA, en cambio, se basan en el uso de resinas, sus acabados son mucho mejores y permiten un mejor prototipado. Hoy en día, los SLA son muy utilizados porque no requieren color, especialmente para los entusiastas de la miniatura y el modelismo, que suelen pintar los modelos que utilizan por su cuenta.
Las impresoras SLA generalmente se apagan por los gases nocivos que genera la resina cuando se calienta. Por lo que son mucho menos seguros y no son recomendables para manos inexpertas.
La composición y el funcionamiento de una impresora FDM
El proceso de impresión en una impresora 3D es el siguiente:
- El filamento termoplástico se carga en la impresora, que se alimenta a la extrusora. Por dentro se calienta hasta que se derrite. La extrusora es muy similar en funcionamiento a una pistola de pegamento caliente.
- El extrusor está conectado a un sistema tridimensional que le permite moverse en tres ejes diferentes. De izquierda a derecha, de arriba a abajo y de cerca y de lejos.
- La impresora imprime el objeto en capas, utilizando el hilo apropiado para cada capa. A menudo tendrá que cambiarlo en medio de la impresión.
- El proceso de impresión es lento porque hay que esperar a que el material utilizado solidifique, por lo que algunas impresoras 3D suelen tener un pequeño ventilador conectado al extrusor.
- Para fortalecer el modelo físico, algunas impresoras tienden a sobrellenar partes del objeto.
La impresora imprimirá capa a capa hasta terminar el objeto, un proceso que, dependiendo de la impresora que utilicemos, puede tardar horas.
¿Cómo conseguimos los modelos para nuestra impresora?
Lo primero que necesitarás es un programa de diseño asistido por ordenador o CAD que te permita modelar el objeto en 3D, puedes elegir el que más te guste y con el que te sientas más cómodo. Tenemos casos como Blender, el famoso AutoCAD que usan los arquitectos e incluso Rhinoceros, muy popular entre los diseñadores de joyas, aunque también puedes optar por Autodesk TinkerCAD, fácil pero sencillo. Todos son válidos para que crees tus propios objetos y si te interesa puedes compartirlos en la red con otros usuarios para que los impriman
Otro método que se utiliza son los escáneres 3D, estas son cámaras que utilizan CCDs en infrarrojo o tiempo de luz para medir la distancia de cada objeto a la cámara, para tener un modelo volumétrico del objeto. Es una técnica muy utilizada en medicina para la obtención de imágenes en 3D, pero al no estar basada en polígonos, sino en vóxeles, requiere transformar el modelo en un modelo poligonal o triangular para luego manipularlo en un programa CAD.
Formatos de archivo para impresoras 3D
Sea cual sea el método que utilicemos, los formatos de archivo más utilizados en la impresión 3D son:
- Formato de fabricación 3D (3MF): es un formato basado en XML y el estándar del consorcio 3MF. Almacena no solo los datos de la forma, sino también el color y el material utilizado.
- Archivo de fabricación aditiva (MFA): otro formato XML con características similares a 3MF, ya que también almacena forma, material y color como información.
- Formato de archivo de objeto (OBJ): se utiliza como formato de imagen compatible entre varios editores 3D, pero no este.
Estos formatos no son suficientes para poder imprimir un objeto en una impresora 3D, sino que es necesario utilizar los programas Slicer, de los que hablaremos a continuación.
¿Qué es el corte para impresión 3D?
Las impresoras 3D imprimen objetos en capas, imprimiéndolos uno encima del otro en un proceso donde cada vez el modelo real gana más altura. A diferencia de otros métodos de impresión de objetos, no estamos hablando de moldear un objeto o tallarlo en una piedra.
Esto hace necesario el uso de un software que toma la plantilla original y la convierte en un formato de archivo en el que se definen cada una de las capas que componen el objeto de impresión. A esto lo llamamos el proceso Slicing y este tipo de aplicación Slicers.
No solo convierte el modelo en una serie de capas que puede utilizar la impresora 3D, sino que en muchos casos nos permite ajustar la altura de cada capa, la densidad de relleno, e incluso crear soportes para que la estructura 3D se soporte a sí misma si necesario en medio de la impresión. Por tanto, este tipo de software también forma parte del proceso creativo para conseguir la mejor pieza posible.
¿Cómo conecto mi impresora 3D a mi computadora?
Bueno, al igual que otras impresoras, puede usar una conexión USB, usar una tarjeta SD para almacenar archivos de impresión e incluso Wi-Fi. Por lo que su instalación es la misma que la de cualquier otro periférico.
Pero, al igual que ocurre con las impresoras convencionales, las impresoras 3D requieren de un software para controlar la impresión 3D, nosotros recomendamos Pronterface, que nos permite controlar sus diversos aspectos de forma directa y cómoda. Además de ser compatible con Windows, Mac y Linux.
Con esto, debería poder imprimir sus modelos en su impresora 3D.